Los
que ya la conocéis sabréis que Carmen es
de esas personas a las que no les gusta llamar la atención
pero que poco a poco van calando hondo en los demás.
Tiene un sentido del humor muy sutil y ocurrente, yo diría
que tirando a “British”. Me encanta cómo
cuenta las anécdotas. A cualquier suceso sabe sacarle
jugo. Siempre me sorprende pues es como “el libro
gordo de Petete”, ¡qué tía!,
es que lo sabe todo. Seguro que alguno habréis
jugado con ella al Trivial y os habrá dado una
buena paliza.
Carmen
se hace querer, inspira confianza. Yo diría que
se le nota la ascendencia castellana: no es de grandes
aspavientos, pero está ahí cuando se la
necesita. Cuando quiere, quiere de verdad, no lo va pregonando
a los cuatro vientos, pero lo demuestra en el día
a día y también en esas ocasiones en las
que otras personas no darían la talla.